Los esguinces son la lesión traumatológica más frecuente.
El mecanismo de lesión es siempre indirecto, siendo un movimiento forzado del tobillo el que provoca la distensión de los tejidos capsulo-ligamentosos. El movimiento más frecuente es una inversión forzada del pie.
Síntomas:
- Dolor, en especial al pisar o caminar
- Dolor ligero al tocar el tobillo
- Hinchazón
- Hematomas
- Amplitud de movimiento limitada
- Inestabilidad en el tobillo
- Sonido o sensación de chasquido al momento de la lesión.
Tratamiento:
Con el propósito de fortalecer los ligamentos, mejorar los rangos de movilidad y recuperar la propiocepción del pie afectado; se recomienda realizar las siguientes acciones:
En las primeras 72 horas de la lesión:
- Evitar el apoyo de la articulación en las primeras 48 horas de la lesión.
- Aplicar hielo (local) durante 20 minutos cada 8 horas
- Aplicar vendaje elástico no compresivo de forma inicial.
- Valoración Medica
Después de las 72 horas:
- Iniciar apoyo parcial diferido con vendaje elástico
- Indicar ejercicios de propiocepción
- Indicar ejercicios de estiramiento y fortalecimiento
Complicaciones:
No tratar adecuadamente un esguince de tobillo, realizar actividades demasiado pronto o sufrir esguinces de tobillo repetitivos puede traer las siguientes complicaciones:
- Dolor de tobillo crónico
- Inestabilidad crónica de la articulación del tobillo
- Artritis en la articulación del tobillo
Medidas de prevención:
- Realiza un calentamiento antes de hacer ejercicio o practicar deportes.
- Usa calzado que calce adecuadamente y que esté hecho para tu actividad.
- Minimiza el uso de zapatos de tacón alto.
- No practiques deportes ni participes en actividades para los que no estés preparado.
- Mantén una buena fuerza y flexibilidad muscular.
- Practica entrenamiento de estabilidad, incluso ejercicios de equilibrio.